La crítica al gordo siempre está, es un blanco fácil, lo ves a simple vista. No puede ocultarse, no hay filtro que le quite esa apariencia de pelota deformada que se distingue a lejos. ¿Te parece cruel? No soy cruel, Gorfobia lo es., o por lo menos es lo que intenta mostrarnos.En esta nueva obra de teatro, dirigida por Nicolás Sorrivas, nos muestra al gordo, como un ser despreciable, pero lo que más provoca rechazo son los personajes que rodean a Leo (el gordo), crueles, obsesivos, pedantes y hasta humillantes.Al principio la obra no entusiasma, de hecho si simpatizas con Leo (el gordo), no te va a provocar gracia, vas ver una obra de teatro que quiere o intenta delirar el espectador, pero no lo logra.
Todo lo contrario, te hace reflexionar. Son duros los amigos de Leo, pero te provocan antipatía. No obstante, lo que hace llevadera a la obra es la música, ya que este musical sí tiene ritmo. En definitiva, “Gordofobia, Un musical obeso”, habla sobre los excesos y las carencias del mundo contemporáneo. Leo, el protagonista de la obra, tiene lo que la sociedad categoriza como cuerpo equivocado: es gordo. Sus kilos de más lo han llevado a apartarse de su familia, sus compañeros de trabajo y su único amor, encerrándose en un círculo vicioso de comida chatarra. Leo no se acepta gordo porque la sociedad se lo impide, imponiendo estándares de belleza que se ajustan más allá de los valores normales de salud. Prejuzgamos un estilo de vida sólo por la talla de un pantalón, acusando a un gordo de llevar una vida sedentaria y excesos en su alimentación simplemente porque le tenemos miedo a lo diferente.
La gordofobiase ha instalado en la sociedad en todas sus formas: le tenemos miedo al cuerpo propio y al ajeno, a engordar, a no encajar en lo que la sociedad nos vende como saludable. Nadie está exento del miedo. Por eso, “Gordofobia, Un musical obeso”, está protagonizado por todos los cuerpos. Así, los noventas aparecen como el contexto ideal para hablar de los excesos y las carencias. Porque, en los noventas, la globalización comenzó a estandarizar los cuerpos en la delgadez, al mismo tiempo que se nos abrían las puertas al consumo y a la pizza con champagne.
Todos los personajes de “Gordofobia, Un musical obeso”, tienen algo que decir acerca de su cuerpo y no están exentos de prejuicios. Ni gordos, ni flacos, ni hombres ni mujeres, se sienten íntegros al comenzar el relato. Algo les falta para completarse. Y derribar los prejuicios les hará conectar, o volver a conectar con el otro. Te va sorprender pero no tanto, pero como dicen lo mejor llega al final, te vas a sentar a comerte todos los platos, hasta llegar al postre más dulce en su final. Que tengas un buen apetitopara ir a ver este musical obeso.
Esmeralda 443
Precio: Desde $300 hasta $400
